Desde el 2006, la ONU estableció el Día Mundial de las Aves Migratorias con el objetivo de crear conciencia sobre de las amenazas que enfrentan estas especies y sus hábitats. Entre los principales riesgos que enfrentan se encuentra la perdida y deterioro de los ecosistemas acuáticos con los que interactúan y la contaminación lumínica.
En cuanto a los ecosistemas acuáticos, es importante resaltar que la mayoría de las aves migratorias dependen de Humedales, ríos, lagos, arroyos, marismas y/o estanques para descansar, alimentarse y anidar. Sin embargo, estos ecosistemas se han deteriorado debido a la contaminación, el cambio climático y el aumento de la demanda humana de agua, lo cual tiene un impacto directo en la conservación de las aves migratorias. Así mismo, la contaminación lumínica les provoca desorientación cuando vuelan de noche, lo que genera colisiones con edificios y la alteración de sus ritmos biológicos
Las soluciones para combatir las amenazas que enfrentan las aves migratorias incluyen la cooperación y articulación internacional, teniendo en cuenta que para trazar su vuelo atraviesan múltiples países hasta llegar a sus destinos. Solo en Bogotá más de 64 tipos de aves pasan para llegar a sus próximos destinos en Brasil, Ecuador, Perú y Argentina. Por ello, además de proteger los ecosistemas acuáticos transfronterizos, se incentivan las acciones encaminadas a atenuar las luces artificiales de las ciudades industrializadas durante las temporadas de migración de las aves.
Consulte más acerca de este día en el siguiente enlace: Día Mundial de las Aves Migratorias | Bogota.gov.co