Un informe hecho por la Organizaciones de Naciones Unidas (ONU) muestra que la contaminación por plásticos es una amenaza creciente en todos los ecosistemas, desde donde se origina la contaminación hasta el mar. También evidencia que, si bien tenemos los conocimientos, necesitamos la voluntad política y la acción urgente de los gobiernos para abordar esta creciente crisis.
El estudio destaca que la contaminación por plásticos en los ecosistemas acuáticos ha crecido considerablemente en los últimos años y que se prevé que se duplique para 2030, con consecuencias nefastas para la salud, la economía, la biodiversidad y el clima.
El informe destaca que el plástico representa el 85% de los residuos que llegan a los océanos y advierte que, para 2040, los volúmenes de este material que fluirán hacia el mar casi se triplicarán, con una cantidad anual de entre 23 y 37 millones de toneladas. Esto significa alrededor de 50 kg de plástico por metro de costa en todo el mundo.
En consecuencia, todas las especies marinas, desde el plancton y los moluscos, hasta las aves, las tortugas y los mamíferos, se enfrentan a riesgos de intoxicación, trastornos del comportamiento, inanición y asfixia. Los corales, los manglares y los pastos marinos además están sofocados por desechos plásticos que les impiden recibir oxígeno y luz.
El cuerpo humano también es vulnerable a la contaminación que generan los residuos plásticos en las fuentes de agua, lo cual podría causar cambios hormonales, trastornos del desarrollo, anomalías reproductivas y cáncer. Los plásticos son ingeridos a través de los productos del mar, bebidas e incluso la sal común, pero también penetran en la piel y pueden ser inhalados cuando están suspendidos en el aire.
La basura marina y la contaminación por plásticos además afectan la economía mundial. Los costos que acarrea la contaminación por plásticos en el turismo, la pesca, la acuicultura y otras actividades, como las limpiezas, se estimaron en US$ 6.000-19.000 millones en 2018. Y se proyecta que para 2040 podría haber un riesgo financiero anual de US$ 100.000 millones para las empresas si los gobiernos exigen que cubran los costos de la gestión de residuos en los volúmenes esperados.
Para demostrar su impacto e incentivar acciones que reduzcan su utilización, el mundo conmemora cada 3 de julio el Día Internacional Libre de Bolsas de Plástico.
En Colombia el 7 de julio quedará prohibida la producción y el uso de plásticos de un solo uso, como bolsas para embalar frutas y verduras, pitillos, platos, tenedores y cucharas, entre muchos otros. Un paso definitivo para impulsar la sostenibilidad y la economía circular.
Quedará prohibido el uso de varios tipos de plásticos de un solo uso, como los pitillos y bolsas de empaque en supermercados, en virtud de la Ley 2232 del 2022 que determinó medidas para la reducción gradual del consumo y la producción de este tipo de productos.
Consulte más acerca de este día en el siguiente enlace: El 7 de julio Colombia le dirá adiós a los plásticos de un solo uso y Informe de la ONU sobre contaminación por plásticos advierte sobre falsas soluciones y confirma la necesidad de una acción mundial urgente