Cada 28 de enero se celebra el Día Mundial por la Reducción de las Emisiones de CO2. El objetivo es crear conciencia sobre el cambio climático global, especialmente sobre la disminución de Gases de Efecto Invernadero – GEI.
La Organización de las Naciones Unidas – ONU, designó este día para tomar decisiones en beneficio del cuidado ambiental y para impulsar el desarrollo y aplicación de políticas de reducción en emisiones de gases.
Entre otras medidas, se plantea mejorar el manejo de fuentes de energía renovables, el cambio a combustibles más limpios, eficiencia de los procesos de combustión y modificar las tendencias de consumo.
Los niveles registrados de gases de efecto invernadero en la atmósfera condenan al planeta a un peligroso calentamiento futuro, según se desprende del último informe que contiene los últimos descubrimientos realizados por la Organización de las Naciones Unidas. El aumento de las temperaturas a nivel global está alimentando fenómenos meteorológicos extremos en todo el planeta, con un impacto en las economías y sociedades. La temperatura media mundial durante los últimos cinco años fue una de las más altas jamás registrada y la escala de los cambios experimentados recientemente en el sistema climático en su conjunto no tiene precedentes en muchos cientos, e incluso miles, de años.