Puente Aranda, Fontibón y Kennedy son las localidades con mayor número de problemáticas ambientales en Bogotá. Por tal razón las bocanadas de humo de sus industrias y vehículos de carga, las descargas de colores a los ríos y los residuos peligrosos en los procesos productivos las hicieron acreedoras en 2007 del título de áreas fuente de contaminación en la capital.

Un año después, la Secretaría de Ambiente decidió ponerle freno a estas problemáticas a través de las Zonas Piloto de Recuperación Ambiental (Zopra), proyecto para que los industriales cumplan con la normatividad ambiental y adopten programas de producción más limpia.

La SDA realizó un censo puerta a puerta en estas tres localidades, empezando con Puente Aranda, el cual arrojó como resultado que 1.177 establecimientos tenían problemas respecto a emisiones, residuos peligrosos o vertimientos, y fueron requeridos por la autoridad ambiental para que se unieran a Zopra.

De este total, 782 empresas, en su mayoría pequeñas y micro, acataron el llamado contra la contaminación ambiental y se vincularon al proyecto, y empezaron a trabajar de la mano con la SDA en la elaboración de su plan de manejo ambiental.

A la fecha, 312 de las empresas Zopra ya cumplen con la normatividad ambiental (39,9 por ciento de las vinculadas), mientras que las 470 restantes trabajan día a día para mejorar sus problemáticas.

Tras casi cuatro años de trabajo, la Secretaría de Ambiente presentará los resultados de las Zonas Piloto de Recuperación Ambiental este miércoles 19 de octubre en el auditorio principal de la Gobernación de Cundinamarca, a partir de las 8 de la mañana.

Puente Aranda, pionera en descontaminación

La primera localidad para implementar Zopra fue Puente Aranda, debido a sus altos índices de contaminación ambiental. En 2008, la SDA requirió a 365 establecimientos, de los cuales 326 se vincularon al proyecto (89 por ciento) y 222 ya cumplen con lo estipulado por la normatividad ambiental (60 por ciento).

Un año después, en 2009, nació la Zona Piloto de Recuperación Ambiental en Fontibón, localidad que se caracteriza por su alto flujo vehicular de carga. La SDA citó a 334 establecimientos por contaminación, de los cuales 256 decidieron vincularse (76,6 por ciento). A la fecha en esta zona de Bogotá 77 empresas cumplen con todos sus parámetros ambientales (23 por ciento).

Finalmente, en 2011, Zopra se trasladó a Kennedy. Allí se identificaron 478 industrias con problemáticas ambientales, de los cuales 200 decidieron vincularse con el proyecto (41,8 por ciento). Actualmente 13 industrias están al día en materia ambiental.

Según Juan Antonio Nieto Escalante, Secretario Distrital de Ambiente, las 395 empresas que no quisieron involucrarse al proyecto serán sancionadas por la SDA, ya que tienen problemas de emisiones, vertimientos y residuos peligrosos.

“La normatividad ambiental tiene sanciones de hasta 5 mil salarios mínimos mensuales legales vigentes, es decir hasta $2.678 millones. Estas empresas ya tienen procesos sancionatorios abiertos en la entidad por contaminación ambiental en curso”.

Reinan las micro y pequeñas

El 89 por ciento de las empresas Zopra, es decir 695 establecimientos, son micro y pequeña industria. Kennedy tiene la mayor concentración de microempresas (294); Puente Aranda tiene 126 y Fontibón 122.

Estas empresas pertenecen a 12 diferentes sectores productivos, como artes gráficas, metalmecánicas, plásticos, alimentos, químico, industrias maderables y no maderables, lavanderías, papel y cartón y farmacéutico.

Vertimientos: principal problema

La SDA evidenció que la generación y mal manejo de las aguas residuales industriales son el problema ambiental más común en las industrias.

530 industrias en estas tres localidades son generadores de aguas residuales industriales, aguas contaminadas con metales pesados, grasas y aceites, sólidos suspendidos, entre otros parámetros.

Sin embargo, 114 establecimientos ya cumplen con un buen manejo de estas aguas. 66 empresas lograron evitar que 9.000 metros cúbicos de estas aguas lleguen a los ríos Fucha o Tunjuelo, y encontraron en el manejo de residuos peligros una alternativa para la protección de estos cuerpos de agua.

Las otras 48 industrias utilizan otras alternativas de mejora como cambio de mecanismos, eliminación de procesos de lavado por limpiezas en seco, identificación de puntos de desperdicio de agua y la construcción de sistemas de tratamiento de sus aguas. Esto les permitió que 15.630 metros cúbicos anuales sean descargados a la red de alcantarillado en cumplimiento normativo.

50 industrias de la metalmecánica dejaron de verter cerca de 3 toneladas de cromo al año, una sustancia que según la Organización Mundial de la Salud (OMS) puede afectar la salud de una persona.

Unos residuos muy “peligrosos”

El segundo problema ambiental es la generación de residuos peligrosos. La SDA identificó 525 industrias en Puente Aranda, Kennedy y Fontibón como generadores de estos desechos.

Con Zopra, 115 ya cumplen, dejando de generar 55 toneladas de residuos peligrosos, equivalentes a 1.100 bultos de cemento.

1.430 galones de aceite usado (equivalente a 26 canecas de 55 galones) que solían ir a al alcantarillado público, hoy en día son dispuestos de manera adecuada; esta cantidad tiene el potencial de contaminar cerca de 50 millones de metros cúbicos de agua, o de generar 8 toneladas de material particulado si es quemada.

Persiste la quema de carbón y madera

145 empresas operan con gas natural, combustible con el que generan 0.58 toneladas de polvo, hollín y humo (material particulado).

Sin embargo, 35 industrias aún consumen aceites usados, madera, ACPM y carbón, prohibidos para consumo en calderas por su alta generación de material particulado; aproximadamente 3.24 toneladas de polvo, hollín y humo arrojan a la atmósfera estos establecimientos.

Otros logros

Con este proyecto se pavimentaron 61 kilómetros de vías en las tres localidades, por parte del IDU y el UAERMV.

Con el Jardín Botánico se logró la plantación de 2.900 árboles nuevos, el mantenimiento de los 34.849 árboles ya existentes y la intervención de los 23 árboles en riesgo; se hizo embellecimiento de fachadas por parte de IDPAC con participación de la comunidad.

Lo que se podría hacer

Nieto Escalante manifestó que todo el impacto ambiental descrito y relacionado con los resultados de la actividad industria evidencia la necesidad urgente que tiene la ciudad de que la totalidad de industrias lleguen al cumplimiento ambiental.

“Bogotá, al igual que el resto del país, se enfrenta a nuevos retos de desarrollo comercial en el marco de los diferentes tratados de libre comercio y acuerdos de asociación económica. Si bien es cierto que estos tratados buscan promover el desarrollo mutuo de los mercados, también busca establecer reglas de igualdad de condiciones para la competitividad”.

En julio y agosto de 2011 entraron en vigencia los tratados de libre comercio (TLC) con Suiza y Canadá, países reconocidos por su estricta protección sobre su riqueza natural, condición que presupone un gran reto para nuestra ciudad en cuento al mejoramiento de sus indicadores de calidad ambiental.

Entre las condiciones más comunes de estos tratados existen algunas de tipo ambiental, como la protección, conservación y uso sostenible de los recursos naturales. “Esto implica que los indicadores que hoy tenemos de calidad ambiental de la ciudad deben, obligatoriamente, mejorar para obtener buena calificación en los mercados de los productos elaborados en nuestra ciudad y asegurar así su entrada en los mercados extranjeros”, apuntó Nieto Escalante.

Publicado por la Secretaría Distrital de Ambiente (SDA) el 19 de octubre del 2011